Henry Díaz Príncipe, un exguardia del Palacio de Gobierno de 32 años, fue encontrado inconsciente en Chepén. Estaba trabajando en la vigilancia de la empresa agrícola Cerro Prieto. Su hallazgo ocurrió en la madrugada del 2 de abril, lo cual despertó preocupación en su familia y en la comunidad.

Tras el descubrimiento, Henry fue llevado al hospital nacional Almanzor Aguinaga Asenjo en Chiclayo, donde los médicos diagnosticaron intoxicación por organofosforados. Estas sustancias químicas son comunes en pesticidas, lo que levantó alarmas sobre la seguridad laboral en el lugar donde trabajaba.

A pesar del tratamiento, lamentablemente, Henry falleció ese mismo día por la tarde. La causa de muerte registrada fue «hipertensión arterial», lo cual ha generado dudas en su familia sobre lo que realmente sucedió. Ellos creen que hay más detrás de su muerte y quieren respuestas.

La familia de Henry ha alegado que él recibió amenazas por reportar un robo de combustible semanas antes de su muerte. Esto ha llevado a sus seres queridos a sospechar que su muerte podría no haber sido un accidente, sino el resultado de una amenaza en su lugar de trabajo.

Mario Díaz Príncipe, hermano de la víctima, exige una investigación exhaustiva para identificar a los responsables. La muerte de Henry ha dejado a su hijo de tres años sin padre y ha causado un gran sufrimiento a su familia, que busca justicia y respuestas por su trágico fin.

La situación ha llamado la atención de las autoridades locales, quienes están siendo presionadas para investigar el caso rigurosamente. Los familiares de Henry quieren asegurarse de que se esclarezcan las circunstancias de su muerte y se verifique si hubo intervención de terceros.

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