El pasado fin de semana, más de veinte mil personas asistieron al Vía Crucis en Chepén. Este evento se convirtió en una emotiva jornada de fe, donde los asistentes mostraron una fuerte conexión espiritual y religiosa a lo largo de todo el recorrido.

La dramatización incluyó la participación de actores tanto regionales como nacionales. Representaron las 14 estaciones de la pasión de Cristo, contribuyendo a una experiencia única y profundamente conmovedora para todos los presentes.

Los fieles caminaron hacia el cerro de Chepén, donde se encuentran esculturas de tamaño real que simbolizan cada etapa de la pasión de Cristo. Esta tradición viva del norte peruano se mantiene con orgullo por la comunidad año tras año.

El alcalde de Chepén, Julio Correa, elogió la excelente organización del evento, que permitió una mayor fluidez y participación. Este esfuerzo enfatiza la importancia del compromiso comunitario en la preservación de esta rica tradición religiosa.

La gran participación de ciudadanos demuestra el fervor religioso y la devoción que la comunidad de Chepén siente por su fe. Este evento no solo es un acto de penitencial, sino también una celebración de unidad y compromiso entre sus habitantes.

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