Las hormigas trabajaban
de la noche a la mañana
incansables, construyendo
transportando, concertando
con ahínco denodado
así un futuro guardar
provisiones a porfía
y ya no sufrir después
de hambre, frío o sequía.
La luciérnaga que veía
a diario tantas faenas,
se decía presumiendo
-«Yo sin tanto trabajar
voy el camino alumbrando,
sin mí no pueden ni ver
por donde van caminando».
Y en tanto que así pensaba
llegó el invierno, dañando
su cuerpo desfallecido,
sin techo donde guardarse
sin calor y sin abrigo.
¡Oh, pobre desprevenida
ni tan siquiera comida
guardó para sustentarse!
¡Ay de mí! -triste decía-
contemplando el hormiguero
que de orden relucía
«Debí pensar todo aquello
sin presumir fementida,
pues guardando «Pan pa mayo
ahora no sufriría».
Hay que pensar con acierto,
que esta lección aprendida
escrita estará por cierto
en el árbol de la vida.
Obras:»Rutas del Aula (Poesía juvenil), «Mis Ensayos» (Poesía costumbrista), «Canto Nuevo» (Poesía Epica), «Alborada»(Poesía).
Escribe obras de teatro.
Be the first to comment on "LA LUCIERNAGA Y LAS HORMIGAS"