La región de La Libertad, específicamente en Santiago de Chuco y Chepén, ha estado en el centro de preocupaciones por temas de seguridad. Recientemente, dos tragedias han conmocionado a la comunidad, reavivando el debate sobre la violencia en la zona y la necesidad de acciones más contundentes para proteger a la población.

El asesinato de Anderson Vásquez Vásquez, un joven de 22 años, ocurrió durante una gresca en Quiruvilca. Según el comandante PNP Carlos Ortiz Parra, la víctima fue apuñalada en la cabeza en un incidente que involucró a personas en estado de ebriedad. Este acto de violencia refleja la problemática que enfrenta la región, donde la seguridad es un tema de preocupación constante.

En otro suceso, el cuerpo de Nehemias Hildebrando Huamán Tocto, de 40 años, fue encontrado en Chepén. Sin embargo, este hallazgo no fue menos impactante, ya que se le descubrió ensangrentado y con signos de haber sido golpeado. La llegada de peritos para investigar el caso de Huamán Tocto evidencia la gravedad de la situación en La Libertad.

La policía ha tomado cartas en el asunto, y la investigación del caso de Anderson está a cargo de la Dirección de Prevención e Investigación de Crímenes (Depincri). La urgencia de resolver estos crímenes es fundamental para abordar la percepción de inseguridad que se ha extendido en la comunidad y sus alrededores.

Estos recientes crímenes no solo impactan a las familias de las víctimas, sino que también generan un sentido de alarma en la población local. La Libertad y sus distritos, como Santiago de Chuco y Chepén, deben enfrentar estos desafíos con seriedad para garantizar la seguridad de sus ciudadanos.

Créditos de contenido e imágenes:
diariocorreo.pe