Recientemente, se llevó a cabo una campaña de vacunación en el penal de Pacasmayo. Esta iniciativa fue posible gracias a la colaboración entre la dirección del penal y el Centro de Salud Catalina. El objetivo principal fue proteger a los internos y al personal de salud ante el riesgo de brotes de enfermedades.

Durante esta campaña, un total de 115 personas recibieron la vacuna. Esto incluyó a 15 servidores y a 100 internas, quienes se beneficiaron de la aplicación de dosis de refuerzo de COVID-19 y de influenza. La brigada de enfermería, compuesta por profesionales capacitados, llevó a cabo el proceso.

La supervisión estuvo a cargo de la directora del penal y del personal penitenciario, quienes aseguraron que todo se realizara de manera efectiva. Esta acción es fundamental, especialmente con el cambio de estación, cuando el riesgo de enfermedades estacionales aumenta. La prevención es clave en este contexto.

Los profesionales de la salud Yuliana Zamora, licenciada en enfermería, y Korina Espinoza, técnica en enfermería, jugaron un papel crucial en la realización de esta campaña. Su dedicación y conocimiento garantizan que los procesos de vacunación se lleven a cabo de la mejor manera posible.

El penal de Pacasmayo, ubicado en una zona vulnerable, es consciente de la importancia de la vacunación. La acción realizada no solo protege a la población interna, sino que también beneficia la salud pública en la comunidad. La prevención de contagios es una responsabilidad compartida.

En resumen, la campaña de vacunación en el penal representa un paso adelante en la mejora de la salud y el bienestar de los internos y el personal. Al reducir el riesgo de contagios, se contribuye también a la salud general de la región. Esta colaboración entre instituciones es vital para enfrentar futuros desafíos en salud.

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