En la región de La Libertad, el crimen organizado ha tomado un vuelo alarmante. Un ejemplo de ello es el asesinato de Jhonny Castañeda Palacios, un vigilante de 34 años en Cerro Colorado, Pacanga. El ataque fue perpetrado por sicarios en motocicleta, quienes dispararon al vigilante, causando su muerte.

Durante su ronda de seguridad, Castañeda Palacios fue sorprendido por los atacantes. Recibió hasta tres disparos, uno de los cuales impactó en su cabeza. La brutalidad del ataque ha conmocionado a la comunidad. Los agentes del Depincri de Chepén están trabajando incansablemente para recopilar testimonios y revisar las cámaras de seguridad en busca de pistas.

Este incidente es solo el último en una serie de crímenes que han incrementado el número de víctimas mortales en la región La Libertad a 255. En la provincia chepenana, se han registrado 18 homicidios, y en Ascope, 17. La delincuencia ha tomado proporciones preocupantes, lo que ha llevado a la declaración de estado de emergencia en tres provincias de La Libertad: Trujillo, Pataz y Virú.

El prefecto regional Carlos Rodríguez ha solicitado el establecimiento de un estado de emergencia tanto en Chepén como en Ascope. La gobernadora Joana Cabrera está a punto de formalizar esta solicitud ante la Presidencia del Consejo de Ministros (PCM). Estas medidas son necesarias para abordar la creciente delincuencia y proteger a los ciudadanos de la región.

Créditos de contenido e imágenes:
diariocorreo.pe