El asesino, tras identificar plenamente a su objetivo sacó su arma de fuego, la rastrilló delante de todos y disparó.

Un hombre departía unos tragos acompañado de sus amigos, cuando de pronto apareció un sujeto de capucha negra, que se acercó a Julio Espinoza Sánchez, sacó un arma de fuego y le disparó a quema ropa, para luego retirarse como si nada.

La víctima se tambaleó, mientras sus acompañantes solo miraban la escena sin hacer nada, hasta que el hombre cayó al suelo. El hecho ocurrió al interior de una discoteca en la provincia de Pacasmayo, en La Libertad.

El sicario salió al patio trasero del local, se acercó a la puerta de ingreso y conversó con una persona, luego regresó, pero antes miró hacia atrás y tras identificar plenamente a su objetivo sacó su arma de fuego, la rastrilló delante de todos y disparó.

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