Como parte de la campaña Peruanos que Suman, de Comercio y el BCP, hemos llegado al asentamiento humano Nuevo Horizonte, a 45 minutos de la ciudad de Chepén, para encontrarnos con Dora Castañeda, presidenta de una asociación de mujeres que buscan lograr la independencia económica para romper las cadenas de maltrato a las que en algún momento de sus vidas fueron sometidos.
“Nos llamamos Asociación Agropecuaria Nuevo Horizonte y estamos en proceso de formalizarla. Estamos formados por unas 25 mujeres, entre madres solteras, mujeres mayores, miembros de todas las edades en realidadDora explica mientras nos lleva a una granja de conejillos de indias.
Hace menos de cinco años, este grupo de mujeres se reunió y decidió buscar la manera de lograr la independencia financiera. “Lo que buscamos es que las mujeres sean económicamente independientes y autosuficientes“, Explicar.
La crianza de cuyes apareció como la opción perfecta para iniciar la búsqueda de este fin. “Es barato y se reproducen rápidamente. Aunque luego surgen problemas como, por ejemplo, que se estresan con mucha facilidad, dejan de reproducirse y algunos incluso mueren por problemas cardíacos.”, explica Dora mientras rellena los comederos con alfalfa.
A pesar de ello, solo en este corral la asociación tiene a la venta más de 600 cuyes. El grupo también se está preparando para dar el siguiente paso.
Actualmente hay más de 600 cuyes en el corral de la Asociación Agropecuaria Nuevo Horizonte. En otras épocas del año, sin embargo, la cifra puede más que duplicarse.
“Hemos logrado un terreno de 250 metros donde queremos armar nuestro matadero, esperamos que poco a poco avancemos hacia eso. La única forma es hacerlo tú mismo.“, aseguradora.
La decisión de esta mujer es admirable. Fue esta virtud la que la llevó a registrar a su hija, Kelly, solo con su apellido hace 25 años cuando vio que el padre no participaría en su crianza, también lo que le permitió criar a la joven que estudia en la universidad. hoy.
“Aquí hay mucho machismo, maltrato y violencia física o psicológica, tenemos que romper esa cadena para que nuestros hijos sean mejores y demostrarles que podemos cambiar las cosas.”, asegura.
Y a nivel comunitario, la determinación de Dora la llevó a organizar a los vecinos para allanar el espacio donde en algún momento se construirá la plaza principal del asentamiento humano. Ahora, asegura, su mente está puesta en lograr que las autoridades construyan por fin la red de agua y drenaje que prometieron por más de 30 años.
El espacio libre donde debería ir la plaza central de Nuevo Horizonte refleja el desinterés de las autoridades locales por esta zona.
“Cuando hay campañas electorales vienen, prometen y luego se olvidan de todos. El agua que tenemos la recibimos cada dos dias por medio de una cisterna, yo se que con agua toda esta zona subiria”, dice Dora mientras reparte los últimos puñados de alimento a las cobayas más pequeñas.
“Pero lo bueno de este grupo es que todos tenemos el mismo objetivo: salir adelante.”, afirma esta mujer cuyo empeño y entrega la convierten en una auténtica peruana que suma.
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