Durante nuestra visita a Turquía llegamos a la Universidad de Estambul, y quedé intrigado por una etiqueta en su escudo: 1453. Me tomó unos momentos digerir que esta universidad había sido fundada unos cien años antes que la más antigua de América: La Universidad San Marcos de Lima.

Es que los marcos de referencia son tan disimilares. Para nosotros los americanos, la pre-historia está tan cerca como hace un poco más de 500 años, en cambio en el viejo continente, y más aún en Asia y Africa, es de lo más común que los registros históricos regresen en el tiempo por miles de años, e inclusive tengan recuerdos diarios de ello. Por ejemplo, visitamos en Estambul dos mezquitas que están construidas una al lado de la otra. Al salir, un sudamericano dijo que no entendía por qué Hagia Sofia era tan famosa, a él le gustó más la Mezquita Azul. La guía tuvo que contenerse para poder decir con absoluta calma: “entiendes que hay una diferencia de mil años entre la una y la otra, ¿verdad?”. Es que nosotros no tenemos un marco de referencia así, donde hayan dos edificios con básicamente la misma maravillosa técnica arquitectural erigidos uno al lado del otro, con mil años de diferencia entre sus construcciones, y que estén siendo usados diariamente hasta hoy.

La historia de las universidades es un fascinante viaje a través del tiempo, reflejando el desarrollo del conocimiento humano y la evolución de las sociedades. Desde la venerable Universidad de Ez-Zitouna, fundada en el año 737 — mas de mil doscientos años de vida institucional, hasta instituciones más jóvenes pero igualmente influyentes como Harvard en 1636 que todavía no cumple los cuatrocientos años, las universidades han sido faros de aprendizaje, investigación y cultura.

Las universidades, en su esencia como instituciones de educación superior, representan un salto cualitativo significativo en el viaje educativo de un individuo, distinguiéndose fundamentalmente de la educación primaria y secundaria en varios aspectos clave. Hay tres aspectos sobresalientes de esta diferencia:

1. Especialización Temática para Profundización del Conocimiento: La educación superior se caracteriza por su enfoque en áreas específicas de estudio, permitiendo a los estudiantes sumergirse profundamente en un campo particular. Esta especialización contrasta con la educación más generalista de la primaria y secundaria, ofreciendo a los estudiantes la oportunidad de desarrollar un conocimiento y una comprensión profundos en disciplinas seleccionadas.
2. Enfoque en la Exploración y Descubrimiento Personal: Las universidades fomentan un enfoque activo del aprendizaje, donde los estudiantes son animados a cuestionar, investigar y explorar, en lugar de simplemente recibir información. Este enfoque autodidacta y crítico fomenta habilidades de pensamiento independiente y solución de problemas, preparando a los estudiantes para desafíos complejos tanto en el ámbito académico como en el profesional.
3. Investigación y Desarrollo de Nuevas Teorías y Tecnologías Innovadoras: La instituciones de educación superior son un motor clave de investigación e innovación. Las universidades son espacios donde se generan nuevas ideas y se desarrollan tecnologías avanzadas, contribuyendo significativamente al avance científico, tecnológico y teórico en múltiples campos. Este aspecto no solo enriquece el conocimiento humano, sino que también impulsa el progreso económico y social a nivel global.

En resumen, su enfoque en la especialización, la exploración autónoma y el avance del conocimiento, juega un papel crucial en el desarrollo intelectual, profesional y social de los individuos y la sociedad en su conjunto.

Generales o especializadas

En el ámbito de la educación superior, encontramos una diversidad notable en cuanto a los propósitos y especializaciones de las universidades. Por un lado, hay instituciones con un enfoque más generalista, diseñadas para ofrecer una amplia gama de disciplinas y programas que abarcan desde las artes y las humanidades hasta las ciencias y la ingeniería. Estas universidades buscan proporcionar una educación integral, preparando a los estudiantes para una variedad de campos y roles en la sociedad.

Por otro lado, existen universidades con un propósito más especializado, centradas en áreas específicas del conocimiento o sectores particulares. Un ejemplo destacado es la Universidad de Ez-Zitouna en Túnez, la más antigua del mundo, que se enfoca profundamente en el estudio y la enseñanza del Islam, la jurisprudencia islámica y la lengua árabe, desempeñando un papel crucial en la preservación y el desarrollo del pensamiento islámico. De manera similar, el Instituto de Tecnología de Massachusetts (MIT) es reconocido mundialmente por su especialización en ciencia, tecnología e ingeniería, siendo un líder en la innovación y la investigación en estos campos.

Esta diversidad en el propósito y la especialización de las universidades refleja la riqueza y la complejidad del conocimiento humano, así como las variadas necesidades y aspiraciones de la sociedad. Cada tipo de universidad, ya sea de propósito general o especializado, contribuye de manera única al tejido de la educación superior, enriqueciendo el panorama académico y profesional global.

Ricas historias

La Universidad de Estambul, por ejemplo, es un destacado testimonio de la rica historia de Turquía y del mundo islámico. Fundada por el sultán Mehmed II tras la conquista de Constantinopla, esta institución representa un punto de encuentro de culturas y épocas, evolucionando desde sus raíces otomanas hasta convertirse en un moderno centro de educación superior.

Por otro lado, en el Nuevo Mundo, la Universidad Nacional Mayor de San Marcos de Perú, fundada en 1551, se destaca como la primera universidad de América. Esta institución no solo ha sido testigo de la historia peruana y latinoamericana, sino que también ha contribuido significativamente a la educación y la cultura en la región.

En el contexto global, es fascinante comparar la edad y el impacto de estas universidades con otras de distintos continentes. A continuación, presentamos una tabla que muestra algunas de las universidades más antiguas que aún funcionan, destacando su año de fundación, país y continente:

Continente	Año de Fundación	País	Universidad
África	737*	Túnez	Universidad de Ez-Zitouna (*La fecha exacta está en disputa)
África	859	Marruecos	Universidad de Qarawiyyin
África	970	Egipto	Universidad de Al-Azhar
África	989*	Mali	Universidad de Sankore (*Fecha aproximada)
Europa	1088	Italia	Universidad de Bolonia
Europa	1096	Reino Unido	Universidad de Oxford
Europa	1134	España	Universidad de Salamanca
Europa	1220*	Francia	Universidad de Montpellier (*Escuela de Medicina – Universidad en 1289)
Europa	1290	Portugal	Universidad de Coímbra
Asia	1315*	Irán	Universidad de Ciencias Económicas (*Escuela de Administración – Universidad más tarde)
Europa	1348	República Checa	Universidad Charles
Europa	1364	Polonia	Universidad Jagellónica
Europa	1365	Austria	Universidad de Viena
Europa	1367	Hungría	Universidad de Pécs
Europa	1386	Alemania	Universidad de Heidelberg
Asia	1398	Corea del Sur	Universidad de Sungkyunkwan
Europa	1425	Bélgica	Universidad de Lovania
Asia/Europa	1453*	Turquía	Universidad de Estambul (Escuela de Mehmed el Conquistador – Universidad en 1933)
Europa	1460	Suiza	Universidad de Basilea
Europa	1477	Suecia	Universidad de Uppsala
Europa	1479	Dinamarca	Universidad de Copenhague
América	1538*	República Dominicana	Universidad Autónoma de Santo Domingo (*La Universidad Santo Tomás de Aquino empieza por bula papal en 1538, es fundada oficialmente en 1558, cerró en 1823 y se recreó como Universidad Autónoma desde 1914)
América	1551	Perú	Universidad Nacional Mayor de San Marcos – Oficialmente la primera Universidad del Nuevo Mundo
América	1553	México	Universidad Nacional Autónoma de México

Esta tabla no solo muestra la diversidad geográfica de las instituciones de educación superior, sino también su longevidad y adaptabilidad a lo largo de los siglos. Cada universidad ha sido un testimonio vivo de los cambios políticos, sociales y culturales en sus respectivos países y continentes.

Tal vez sea sorprendente la ausencia de universidades chinas en la lista. La historia de la educación en China merece, tal vez, capítulo aparte debido a los muchísimos cambios que cada dinastía impregnaba en el sistema. La lista de universidades contiene las instituciones que tienen una continuidad desde su fundación y que son reconocidas como instituciones de educación superior. Los equivalentes al concepto de universidad en China empiezan a partir del siglo XIX.

Al reflexionar sobre la historia de estas universidades, podemos apreciar mejor su papel crucial en la formación del pensamiento crítico, la promoción del conocimiento y el fomento de la innovación. Desde África y Asia hasta Europa y América, las universidades han sido y siguen siendo centros vitales para el progreso humano.