La ciudad de Trujillo, en La Libertad, está experimentando un alarmante aumento en la criminalidad, con un incremento significativo en los casos de sicariato, extorsiones, asaltos y asesinatos. La Policía Nacional del Perú ha proporcionado datos preocupantes que indican que la situación actual supera los números registrados en años anteriores. Entre los grupos delictivos identificados se encuentran Los Pulpos y La Jauría, quienes han intensificado la sensación de inseguridad entre los habitantes. La dificultad para capturar a estos criminales radica en su capacidad para reclutar constantemente nuevos miembros y fortalecer su presencia en la región.

Los incidentes reportados en enero de 2024 incluyen el hallazgo del cuerpo de un empresario minero secuestrado y torturado, el ataque a una estudiante de enfermería, la detonación de un artefacto explosivo en un negocio local y el asesinato de dos adultos mayores por sicarios extranjeros. Estos crímenes, ocurridos en lugares públicos y a plena luz del día, reflejan la audacia y la impunidad con la que actúan estos delincuentes. La provincia de Trujillo, seguida de Pacasmayo y Virú, se han convertido en las zonas más afectadas, registrándose aproximadamente un asesinato por día.

La violencia en La Libertad ha alcanzado niveles sin precedentes, con un total de 325 crímenes reportados en 2023, lo que representa un aumento significativo en comparación con los años anteriores. El coronel PNP Javier Méndez Yupanqui, jefe de la Divincri de La Libertad, expresó su preocupación por el crecimiento de la criminalidad, especialmente por el número de homicidios, que se espera supere las cifras del año anterior. Muchos de estos crímenes están relacionados con ajustes de cuentas entre bandas rivales y son orquestados por líderes criminales que operan desde la prisión.

Los criminales tienden a aprovechar ciertos horarios para cometer sus delitos, principalmente los lunes entre las 9:00 y 11:00 de la mañana, y durante la noche desde las 11:00 p.m. hasta la medianoche. Este patrón se evidenció el pasado 15 de enero, cuando cuatro personas fueron asesinadas en Trujillo durante estos intervalos de tiempo. La situación en La Libertad es crítica, con una comunidad cada vez más atemorizada y una lucha constante por parte de las autoridades para restaurar la seguridad y el orden.

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